jueves, 21 de marzo de 2013

Sobre descuadres presupuestarios, accionistas y clientes. El mundo de la SAD

¡Oh sorpresa! El Sporting tendrá que traspasar a algún jugador al acabar la temporada, para no descuadrar el presupuesto, según informa el diario El Comercio.  Esta vez los que descuadran no son los responsables de la parcela deportiva como en años anteriores (los jugadores no se fichan dos veces ni hay indemnizaciones a técnicos), no, este año son los abonados, que por lo visto pagan poco, y las instituciones públicas que no cumplen lo acordado.

Antes de diseccionar la información de El Comercio, que como veréis una vez más no resiste un análisis, me gustaría hacer una reflexión. El Sporting es una Sociedad Anónima Deportiva con un capital social de algo más de 7 millones de euros. Don José Fernández se hizo con su control poniendo unos milloncetes (de pesetas eh) en el proceso de conversión, más lo que luego compró a particulares, al Ayuntamiento, lo que le rateó tras juicio Tapia Sports, lo que puso en ciertas sociedades interpuestas o la deuda que él y sus consejeros crearon y que más tarde capitalizó en acciones.En definitiva, nadie sabe cuánto dinero puso ni a dónde fue a parar,  pero  sin duda fue el suficiente para tener el título de salvador vitalicio y para que el vieyu y la vieya de turno te increpen con el clásico "¿vais a poner vosotros les perres?".

Pues bien señora y señor, el conjunto de socios, ahora conocidos como abonados o clientes, ha puesto durante los últimos 20 años entre 2  y 6 millones de euros.... cada temporada, a cambio  de ningún poder de decisión ni derecho a la pataleta sin que te llamen desalentador o te den portazo en las narices en la  Escuela de fútbol municipal.  Lo único que te dan es la posiblidad de ver el espectáculo cada dos fines de semana en una butaca sucia  y con fortuna no cagada y la posibilidad de mear en unos baños en unas condiciones tercermundistas. Mientras tanto, los salvadores se fuman tranquilamente su puro en el palco tomándose un Gyn tonic porque durante 20 años pusieron más o menos lo que el resto puso en una sola temporada. Y sin contar con las aportaciones de los que van puntualmente a los partidos previo paso por taquilla, o con las ayudas de las instituciones públicas, dinero que en definitiva también sale de nuestros bolsillos.

Por si fuera poco lo anterior, tenemos que comulgar día tras día con informaciones como la que hoy publica El Comercio. A estas alturas de la película ya sabemos que el que las suscribe no se va a poner a contrastar con documentos lo que desde Mareo le dictan, o que si lo hace se encuentre con el problema de que los complejos presupuestos sólo los puede descifrar alguien con un nivel de formación contable a la altura de Fray Luca Pacioli. Veamos unos ejemplos.





Los indescifrables documentos de arriba ( y que podéis ampliar pulsando sobre ellos) son los presupuestos aprobados en la última junta de accionistas del Real Sporting de Gijón SAD, aunque el que los compare con lo que se publica  en el decano pueda pensar que sean los del Sporting Mahonés o los del Sporting de Portugal, porque poco tienen que ver los del club gijonés con lo que aquí se dice:




 Pero ¿cómo que 13 Millones de presupuesto? ¿No está bien claro arriba que tanto gastos e ingresos son 18 M? ¿a qué llama presupuesto entonces? Ya es la tercera vez que yo haya contado que se publica lo mismo , y como la noticia suponemos que  sale fuentes del club, uno llega a la conclusión de que o bien el filtrador no sabe por donde le da el aire o bien que lo que se presenta en las Juntas es una auténtica pantomima. Así no es de extrañar las desviaciones que hay temporada tras temporada.



Ahora hay que sumar que en Copa del Rey no pagaron los abonados. Seguro que por culpa de eso no se complieron las previsiones de 0 euros por dicho concepto. Descuadre total ¿eh? Ah, que lo que descuadra son los gastos de abrir El Molinón, demos gracias por no haber pasado más rondas y no estar en bancarrota. Pero ¿es verdad eso de que los abonados no pasaron por taquilla en Copa del Rey?





Ahora me pregunto si patrocinadores y televisiones pagan lo mismo juegues una ronda o tres, la verdad que no lo sé, pero de ser así manda cojones.

Y ahora vamos con lo que la noticia no menciona, ya que si hablamos de mermas de ingresos lo suyo sería también hacerlo del dinero extra que entra:

Como se puede apreciar,  en el presupuesto de ingresos se incluye un beneficio procedente del traspaso de jugadores de 2 millones. Bien, como se explicó en la Junta corresponde al traspaso de Barral al equipo turco de nombre difícil de escribir. Pues bien, ¿donde están los dos millones y pico de Botía? Aún quedando la mitad para intermediarios, yo creo que serían suficientes para cubrir ese desfase provocado por los gastos de abrir El Molinón en partidos de Copa. ¿O será que por una vez hemos sido prudentes y no contamos con  ese dinero no vaya a ser que los tribunales le dan la razón al Barcelona y nos quedemos sin un euro?

Y ya que en la noticia se nombra a Miguel de las Cuevas,  no estaría de más una mención a lo que se publicó cuando se cedió al Osasuna, y que al Sporting le supondría un ingreso no presupuestado en caso de permanencia del club navarro,  y que aunque otra mitad quedase por el camino valdria también para cubrir la merma por los ingresos por publicidad.

Pero no nos engañemos, lo mismo dará que Osasuna siga en primera o que los tribunales le den calabazas al Barcelona, o que se nos aparezca el espíritu santo y ascendamos a primera. Salvo que Doyen Group eche una mano (seguro que no la echan por culpa de los desalentadores) la única solución pasa por la venta de Trejo, Canella o Borja López. Y al final no será una, serán dos o incluso tres, porque esta comedia se repite verano tras verano.

Las SAD son así, como dice el presidente Vega Arango, y mientras tanto a tragar con que al Sporting lo salvan ellos.











1 comentario:

  1. Por no hablar de dónde acabaron los 5 kilos de José Angel. Primero era que no entraban en el presupuesto de aquel año, luego que se pagaban en dos plazos, y después ya eran pasado. Nunca más se supo

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